lunes, 11 de junio de 2007

El 145 aniversario en Fotos

MINISTRO DE JUSTICIA, ex alumno de la generación del 89 Carlos Maldonado Curti recibiendo un galvano de reconocimiento de manos del rector del liceo Eduardo de la Barra don Roberto Pantoja, con motivo de la conmemoración del centésimo cuadragésimo quinto aniversario del Liceo
























Participantes en el Acto Conmemorativo de 145 Aniversario del Liceo.


Directiva del Centro de ex Alumnos con ex Alumno Carlos Maldonado
(De izquierda a derecha: Antonio Lautaro Borja, Donato Piras, Gaston Almonacid, Carlos Maldonado,Lukas Kriskovic)

jueves, 7 de junio de 2007

ARTICULO PUBLICADO EN EL MERCURIO

APUNTES LICEANOS: 145 AÑOS

CRISÓLOGO PERRETTI JIMÉNEZ (Ex Alumno )

Quizás ese día 2 de junio de 1862, cayó la primera lluvia o fue una fría mañana de otoño en Valparaíso, pero cierto es que a las 8 de la mañana, 150 jóvenes por vez primera cruzaban el viejo portón del vetusto edificio de la calle Retamo, cedido por los religiosos de La Merced, para que funcionara el liceo de Valparaíso.

De esta forma, 145 años atrás, nacería el actual Liceo N° 1 de Hombres Eduardo de la Barra, plantel que hoy cobija a jóvenes de ambos sexos. Es el egregio hombre público Eduardo de la Barra quién daría con el tiempo su nombre al establecimiento educacional de esta ciudad.

Ingeniero, geógrafo, graduado en el Instituto Nacional, periodista, filósofo, literato, lingüista, político, profesor, orador elocuente y diplomático, lega su nombre a quienes hoy como ayer se cobijan bajo la trilogía "Honor, Deber y Unión".

El Liceo Eduardo de la Barra o de Valparaíso, como se llamó en sus comienzos, nace al amparo de múltiples artículos publicados en El Mercurio de Valparaíso, que llaman al gobierno de la época precedido por don José Joaquín Pérez, a crear un establecimiento acorde con la época y las necesidades de esta ciudad, ante lo cual, el Presidente dicta la ley que dice en el artículo 2 lo siguiente: "Se establece, bajo los mismos planes del Instituto Nacional y tiene los cursos que a continuación se expresan: de humanidades, de matemáticas aplicadas a las profesiones de ingenieros, geógrafos, arquitectos y otras, y de comercio".

Los años pasarían y son nuevos ramos los que se agregarían como latín, aritmética, catecismo, historia antigua y griega, dibujo al natural, historia sagrada, francés, inglés, alemán, vida de Jesucristo, filosofía e historia de América y de Chile, entre otros.

Tiempos difíciles en una nación pujante, pero el plantel avanza, en el tiempo queda la calle Retamo, se sucederá una nueva casa que albergará a la comunidad liceana naciente, calle Edwards y finalmente hasta hoy, la calle Colón.

Los patios del Liceo servirán de casa temporal a la Escuela Naval de Chile, y cuando Chile se ve envuelto en una nueva guerra, como la del Pacífico, el establecimiento se transformaría en hospital de Sangre, de soldados prisioneros peruanos y chilenos. La Revolución del 91 tampoco estaría ausente de la historia liceana, muchos serían los estudiantes que abrazarían la causa balmacedista.

Fueron los patios y salas de este establecimiento, que cobijan el primer Grupo Scout, creado en 1908, cuando Baden Powell llega a Chile, y en particular en Valparaíso. La Liga Protectora de Estudiantes Pobres, la Sociedad de Instrucción Primaria Nocturna y la Sociedad de Colonias Escolares, los primeros cursos de Leyes de la U. de Chile y la Escuela de Pilotines Mercantes también estarán al alero del establecimiento.

Y finalmente, el profesor Juan Luis Marín, como una manera de homenajear a los alumnos caídos en la Guerra del Pacífico y a los Héroes de Iquique, marcha por primera vez ese 21 de mayo de 1929, a colocar con un grupo de alumnos una ofrenda a los pies del heroico Capitán Prat y tripulación.

Hoy han pasado 145 años y el Liceo N° 1 de Hombres Eduardo de la Barra de Valparaíso ha legado a Chile presidentes de la República, ministros de Estado, senadores, diputados, médicos, arquitectos, militares, catedráticos, en fin, una pléyade de hombres y mujeres, que engrandecen a la Nación bajo un lema que los reúne y compromete a ser mejores. "Honor, Deber y Unión".